La energía eólica se obtiene a partir de la fuerza del viento.
Esta energía cinética que generan las corrientes de aire se convierte en energía eléctrica mediante los aerogeneradores que están conectados a las grandes redes de distribución.
Gracias a los parque eólicos se consigue una fuente de energía renovable mucho más barata y menos contaminante que otras energías convencionales.
Junto a la energía hidráulica, solar y undimotriz, es la energía renovable más empleada en la actualidad.
La acción del viento mueve las hélices de los aerogeneradores y gracias a un generador convierten la energía cinética del viento en energía eléctrica.
Estos aerogeneradores alcanzan hasta los 50 metros de altura y sus hélices pueden llegar a medir 23 metros.
La dirección del viento es variable. Por ello cumple una función muy importante la veleta.
Esta indica la dirección en la que sopla en viento para conseguir aprovechar al máximo su fuerza y generar una mayor cantidad de energía eléctrica.
Gracias a su conexión con la red eléctrica, se distribuye a los hogares y comercios.
Tan solo se necesita una zona con condiciones favorables para generar corrientes de viento.
Por otro lado, hay quienes no apoyan al 100% la energía eólica ya que puede suponer un impacto visual y modificación del paisaje.
Es una energía con gran margen de mejora. Ya se han ideado alternativas a los actuales molinos de viento que causan un menor impacto.
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